miércoles, 10 de noviembre de 2010

Pueblos y Naturaleza - Trabajo VII - Mapas

Pueblos y Naturaleza - Trabajo VII - Texto III

La Deforestación de los Bosque Lluviosos del Congo
21 de noviembre de 2007

El Congo es uno de los ecosistemas más amenazados de la Tierra. La tala comercial, los desmontes para la agricultura de subsistencia y los amplios enfrentamientos armados entre civiles han devastado los bosques, desplazando a sus habitantes e incrementando el comercio de carne de especies silvestres. Desde la década de los 80s, África ha tenido las más altas tasas de deforestación a nivel mundial.

Tala

La tala en la cuenca del Congo se ha incrementado significativamente desde que regresó la paz a la región. En el 2004 el Congo, estimulado por el Banco Mundial, anunció planes para intensificar la tala comercial de sus bosques lluviosos. La industria maderera es una de las principales generadoras de empleo en los países del Congo y miles de trabajadores dependen de estas compañías para cubrir sus necesidades básicas de salud y otros servicios. La tala ilegal es un gran problema porque los funcionarios mal pagados buscan complementar sus ingresos permitiendo que se talen áreas restringidas.

Desde el fin de la guerra en la República Democrática del Congo, se han otorgado concesiones y el ritmo de extracción está repuntando en lo que queda del bosque lluvioso más grande de África.

Agricultura de Subsistencia

La mayor parte de la deforestación del Congo es ocasionada por las actividades de subsistencia local de los campesinos y habitantes pobres, que dependen de las tierras del bosque para establecer cultivos y colectar leña. Es muy común la práctica de la tumba, roza y quema para desmontar el bosque.

Generalmente, los campesinos pobres y los colonos llegan a las tierras boscosas siguiendo los caminos creados por las empresas madereras, aunque en años recientes los enfrentamientos armados han movilizado hacia el interior del bosque lluvioso a muchos centroafricanos que escapan de la violencia imperante.

Guerras Civiles

El centro de África ha estado plagada de violencia desde mediados de los 90's. Cientos de miles de refugiados se han desplazado a través de los bosques del Congo, destruyendo la vegetación y devastando las poblaciones de fauna silvestre a su paso. Algunos parques nacionales como el de Virunga -hogar del amenazado gorila de montaña- han sido saqueados e incluso los trabajadores del parque fueron asesinados. Los campos de refugiados que se encuentran alrededor de los parques incrementan la presión sobre las áreas protegidas.

Comercio de Carne de Especies Silvestres

Actualmente, los visitantes de muchas ciudades centroafricanas pueden comprar carne de prácticamente cualquier animal del bosque. La demanda de carne silvestre es impulsada por el deseo de obtener proteína, independientemente de cual sea su fuente animal, por lo que la demanda varía de un mercado a otro. En Gabón, McRae encontró que el consumo de carne silvestre per cápita puede alcanzar ocho libras al año.

La disponibilidad de esta carne se ve facilitada por la construcción de caminos para la industria maderera que permiten el acceso de cazadores y colonizadores al bosque. Los cazadores se ganan la vida vendiendo la carne silvestre a taladores, comerciantes y aldeanos. La mayor parte de la carne silvestre que se encuentra en los mercados citadinos es llevada ahí por los taladores.

Con la expansión de la tala comercial en la cuenca del Congo se espera un incremento en la caza regional de estas especies.

Minería

La cuenca del Congo contiene algunos de los depósitos minerales más ricos del mundo. Las actividades mineras son poco vigiladas y prácticamente no se tiene ninguna consideración de sus efectos sobre la salud a corto plazo y mucho menos sobre los impactos ambientales.


http://es.mongabay.com/news/2007/deforestation.html

Pueblos y Naturaleza - Trabajo VII - Texto II

El teléfono celular y la minería: las peores amenazas para el Congo
24-05-07

Se venden millones. Parecen la tecnología más eficiente, "imprescindible", inofensiva. Su propaganda con modelos publicitarios está siempre en todo medio de difusión masiva. Parece que no hay nada malo en tenerlos, regalarlos… Pero muchos podemos ser sin querer cómplices de los que están destruyendo a la segunda área verde del planeta después del también amenazado Amazonas: las selvas y bosques del Congo, centro enorme de biodiversidad y hogar de innumerables especies, ahora severamente amenazadas. Este informe explica por qué. La tragedia que se oculta detrás de los teléfonos celulares.

Las montañas orientales del Congo son una región de diversidad biológica inmensa donde viven animales en mucho peligro de extinción (hipopótamo, rinoceronte, bonobo, okapi, y uno de nuestros parientes más cercanos: el gorila de montaña (Gorilla beringei). El Parque Nacional de Virunga y sus zonas aledañas, de este lugar estamos hablando, eran hasta hace poco uno de los lugares más bellos y luminosos de la Tierra, un paraíso, pero la codicia de algunos hombres y de empresas multinacionales, pueden acabar rápida y definitivamente con este paraíso.

Coltán y niobio. ¿Qué son? Cobalto y uranio son más conocidos. Más todavía: oro, diamantes, cobre y estaño. Son todos minerales que hay en las montañas de esta región de la República Democrática del Congo (RDC), en áreas que por ser parques nacionales - declarados Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO - deberían ser zonas protegidas. Pero no lo son (aunque algunos fueron asesinados por defenderlas, sólo en el Volcán Virunga mataron casi cien guardaparques), y la desolación que cada vez hay mas en el lugar hace ver la crueldad de estas multinacionales y la hipocresía internacional –que se lava las manos en vez de elegir el cuidado de la vida en vez del "progreso" comercial tecnológico.

¿Para qué se usan los cuatro primeros minerales que nombramos? El coltán se usa con el niobio para fabricar los condensadores para manejar el flujo eléctrico de los teléfonos celulares. Los otros dos, cobalto y uranio, son elementos esenciales para la industria nuclear, química, aerospacial y de armas de guerra. Los dos primeros prácticamente sólo se encuentran en esta región del mundo (alrededor del 80% de las reservas mundiales de coltán están en el Congo).

Por el control - sobre todo - de estos cuatro minerales escasos hay en África una guerra tremenda. Desde 1996, esta nación vive una tragedia donde (según Amnistía Internacional) ya murieron más de 3,9 millones de personas por las invasiones y guerras patrocinadas por los poderes multinacionales para controlar la minería de la región. El motivo del genocidio es estos minerales que buscan las corporaciones.

En 1996, EE.UU. patrocinó una invasión de fuerzas militares de las vecinas Rwanda y Uganda. Hacia 1998 tomaron el control y ocuparon las áreas mineras estratégicas. Muy pronto, el ejército rwandés comenzó a ganar más de 20 millones de dólares por mes con la minería del coltán. Aunque el precio del metal ha caído, Rwanda mantiene su monopolio de la explotación y comercio del metal del Congo. Hay cientos de informes sobre abusos de los derechos humanos en esa región minera. El coltán sale de las minas a puestos comerciales clave, donde lo compran mercaderes extranjeros que lo envían al exterior, principalmente a través de Rwanda. Las empresas con capacidad tecnológica suficiente convierten al coltán en el codiciado tantalio en polvo y lo venden a Nokia, Motorola, Compaq, Sony y a otros fabricantes que lo usan en teléfonos celulares y otros aparatos de tecnología "de punta".

El próximo paso, una vez entendida la explotación y la violencia introducida entre los habitantes de África central, es responsabilizar a corporaciones como Sony y Motorola de alimentar con el hambre y la destrucción los juguetes de alta tecnología que consumen EEUU. y las clases opulentas del Mundo. Estas corporaciones no desean movimientos de protesta que empañen su reputación. Y sobre todo, tampoco desean llamar la atención hacia el coltán que mata a los gorilas, ni sobre las guerrillas que subvenciona.

Esta civilización moderna tiene que darle más valor a los seres vivientes, sean gorilas o humanos, que son afectados por la fabricación de los juguetes habituales de alta tecnología, como los teléfonos celulares. Hay que exigirle una existencia más compasiva a las empresas corporativas que crean mercados destructivos, y al sistema de medios de comunicación que ha fabricado nuestro consentimiento.

No se trata de cuestionar el uso de los teléfonos celulares (aunque ésa sería una gran solución). Lo que debemos cuestionar es la apropiación de nuestro planeta por un modelo que consume los recursos, en vez de respetar la vida de los hogares y las comunidades.

 Cristóbal Saura (Buenos Aires)


Pueblos y Naturaleza - Trabajo VII - Texto I

Arrasando la Amazonia en nombre del progreso de las multinacionales
18-06-06 Por Hernán L. Giardini *


La selva amazónica es la mayor extensión de Bosque Primario del planeta y en ella viven el 50% de las especies vegetales y animales conocidas, y 220.000 indígenas de 180 pueblos diferentes. Pero está desapareciendo a un ritmo alarmante. Todas las medidas que se han tomado para atajar esta situación se están revelando inútiles, ya que la tasa de deforestación continúa aumentando. Este aumento se debe, en buena parte, a un nuevo agente de deforestación, que se suma a la actividad maderera ilegal, y que se ha agravado durante los últimos años: la plantación de soja transgénica en zonas de selva previamente deforestadas.

La selva amazónica es la mayor extensión de Bosque Primario del planeta. La vastísima y compleja red fluvial que configura el río Amazonas y sus innumerables afluentes es el mayor reducto de biodiversidad intacta que queda en el mundo y su reducción es un problema de escala global.

Cubriendo el 5% de la superficie terrestre, la Amazonia se extiende por aproximadamente 7,8 millones de kilómetros cuadrados en nueve países (Brasil, Bolivia, Colombia, Ecuador, Guyana, Perú, Surinam, Guayana Francesa y Venezuela). Del total, más de 5 millones de Km2 se concentran en Brasil. La región amazónica posee 25 mil kilómetros de ríos navegables y contiene cerca del 20% del agua dulce del planeta, y se estima que allí viven el 50% de las especies vegetales y animales conocidas:




• 350 especies de mamíferos, siendo 62 sólo de primates.
• 1.000 especies de pájaros.
• 60.000 especies de plantas, siendo 5.000 sólo de árboles.
• 3.000 especies de peces.
• 100 variedades de anfibios.
• 30 millones de especies de insectos.
• Millones de invertebrados.



En las profundidades de la selva amazónica habitan unos 180 pueblos originarios diferentes (unas 220.000 personas) que, junto con muchas más comunidades tradicionales, dependen del bosque que les proporciona todo lo que necesitan, desde alimento y cobijo hasta herramientas y medicinas, y que juega un papel crucial en su vida espiritual.

La soja, nueva amenaza

El cultivo de soja se ha convertido en uno de los principales agentes de la destrucción de la selva amazónica brasileña. Se calcula que, hasta el momento, 1,2 millones de hectáreas de selva han sido arrasadas para cultivar soja. La expansión del monocultivo de soja en la Amazonia implica la pérdida de biodiversidad y en muchos casos la contaminación del agua de las reservas indígenas.

En 2004 y 2005 se plantaron más de un millón de hectáreas de soja dentro del bioma amazónico. Soja que, por su alto valor proteico, se utiliza principalmente para producir el alimento del ganado que comen en Europa.

Lo cierto es que empresas multinacionales están devorando la Amazonia para plantar soja. Y la carne alimentada con esta soja (pollos, cerdos y vacas) termina en los estantes de los supermercados europeos y en los mostradores de empresas de comida rápida como Kentucky Fried Chicken y Mc Donald´s.

La deforestación de la Amazonia por el avance de la frontera agrícola debe ser imperiosamente detenida, tanto por lo que implica la importante pérdida de biodiversidad como por su influencia en las condiciones meteorológicas de la región y sobre el cambio climático global, dada la capacidad de los árboles de fijar el dióxido de carbono y producir oxígeno. Además, la quema de la selva, como paso previo a la plantación de soja transgénica, produce el 75% de las emisiones de efecto invernadero de Brasil.

Otras causas de la deforestación

·                     Talado comercial:
La tala de árboles tropicales para exportación - caoba, teca, etc. - así como otros árboles utilizados en la fabricación de muebles viene seguida de otras industrias relativas al uso de madera como materia prima - aglomerado y cartón, por ejemplo. A esta lista se añade la industria papelera, que requiere una masiva cantidad de árboles para la elaboración de pasta papelera. Para satisfacer la creciente demanda mundial esta industria requiere de la quema de extensiones cada vez mas grandes de la selva Amazónica, y replantarla con árboles cuya madera es apta para la elaboración de pasta papelera.

·                     Cría de Ganado:
Los rancheros requieren de más pasturas para apacentar su ganado. Se estima que para criar un buey se requieren dos acres de terreno.

·                     Construcción de Carreteras:
Desde la década de los 70s se han construido mas de 9.000 millas de caminos en la selva Amazónica, poniendo en peligro no solo el hábitat natural de plantas y animales sino también la vida misma y sobrevivencia de tribus nativas.

·                     Presas Hidroeléctricas:
Los diques o presas hidroeléctricas poseen un impacto negativo sobre la vida salvaje local, afectando a los peces migratorios, por ejemplo.

·                     Minería:
La fiebre de oro en Brasil comenzó en la década de los 80s, con el descubrimiento de ese metal en Sierra Pelada, atrayendo unos 250.000 mineros en búsqueda de riqueza rápida y dispuestos a vivir y trabajar en condiciones infrahumanas. Las prácticas de la industria minera requieren liberar toneladas de mercurio sobre el medio ambiente, causando daño irreparable a los cursos de agua, vegetación y animales.


http://www.unique-southamerica-travel-experience.com/deforestacion-amazonica.html